Estabas
más guapo cuando yo te miraba. Y eras aún más bonito sin ropa. Y
sin los ojos rojos de tanto olvidar besos en botellas de ginebra.
Eras más dulce con saber a chocolate caliente por las mañanas. Y seguro que
tus besos ya no saben igual. Seguro que nadie te besa tan suave, ni
con tanto amor como yo. Eras más bonito en mi pieza, sin camiseta y
oliendo a cigarro y pasión. Estabas más guapo y más tú. Más
borracho de amor sin alcohol. Más ciego de ratos bonitos.
Yo
era más dulce sin sabor a ron. Sin besos que no siento. Sin resaca y
sin sexo sin amor. Más cuerda y más sensata. Menos predecible. Ya
no sé pensar cuando grito. Ni cuando beso. Ni cuando bebo. Ni
siquiera cuando escribo. Ahora vivo rápido. Sin sentir y sin pensar.
Que el pensar hace daño. Y ahora es tiempo de vida. De domingos de
resaca sin tu espalda. Ahora empieza la tormenta.
Ya llegará la calma.
Ya llegará la calma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario